Es habitual que durante las situaciones de crisis, como la que actualmente estamos viviendo por culpa del Covid-19, inicie o aumente entre la población el consumo de alcohol y otras sustancias tóxicas.
De acuerdo con distintos medios de comunicación, como resultado del aislamiento físico, se ha incrementado considerablemente la compra de bebidas alcohólicas, especialmente de cerveza. Este aumento del consumo puede deberse a que muchas personas toman alcohol con el objetivo de relajarse y entretenerse mientras están en casa. Al mismo tiempo, también aumenta la ingesta de alcohol entre las personas que tienen menos posibilidades de adquirir otras drogas que consumen habitualmente, por lo que lo utilizan para sustituir o sobrellevar las dificultades.
Mitos del consumo de sustancias en etapa de confinamiento
Mito: El alcohol y otras drogas relajan y alivian el estrés.
Realidad: Inicialmente el consumo puede generar estados placenteros, pero después puede ocasionar mayor estrés y ansiedad, alterar el sueño y limitar la capacidad de afrontar los problemas adecuadamente.
Mito: El alcohol da energía, activa y anima.
Realidad: El alcohol es un depresor del sistema nervioso y no es la solución para hacer frente al aburrimiento, la apatía y el desánimo provocado por el confinamiento, ya que después de una breve sensación de placer nos provocará más descontrol en las emociones, fatiga y sentimientos de tristeza.
Mito: Consumir me permite controlar mejor la situación.
Realidad: Al contrario, el consumo de alcohol u otras drogas limita la capacidad de autocontrol, lo que dificulta seguir las exigentes medidas de confinamiento y aumenta la probabilidad de contagio.
Mito: El alcohol y otras drogas ayudan a dormir.
Realidad: Es posible que la ansiedad, el miedo y el cambio de rutina producidos por la situación extraordinaria del momento nos provoquen alteraciones de hábitos como la hora de dormir. Recurrir a cualquier sustancia alterará aún más la calidad del sueño.
Mito: El consumo mata el virus.
Realidad: Ningún estudio científico ha confirmado este rumor. El consumo excesivo de alcohol disminuye las capacidades de las defensas del organismo.
Recomendaciones para pacientes con trastornos por consumo de sustancias
Las personas con problemas relacionados con el consumo de sustancias pueden tener más probabilidad de experimentar malestar emocional durante el aislamiento. Y, por otra parte, las personas con más malestar emocional corren más riesgo de desarrollar una adicción durante esta época de crisis sanitaria.
Es importante que las personas que hayan conseguido dejar de consumir alcohol y otras sustancias mantengan su motivación y busquen nuevas estrategias de forma virtual o a distancia para mantener rutinas saludables y prevenir recaídas, ya que las medidas de confinamiento pueden provocar estrés y dificultades emocionales.
Consumo de sustancias tóxicas vs. contagio por Covid-19
Las personas con trastornos por consumo de sustancias tienen un riesgo más alto de afectación por el coronavirus SARS-Covid-19. Pues en su mayoría las sustancias tóxicas afectan y alteran directamente corazón, pulmones, vasos sanguíneos, hígado, entre otros; generando problemas de salud cardiacos, pulmonares y respiratorios. Así como complicaciones mayores que lleven a la muerte en caso de sobredosis.
