Para prevenir enfermedades graves, es muy importante la vacunación en los adultos mayores. Su esquema de vacunación cuenta con tres vacunas: la de influenza estacional, la neumocócica polisacárida y la de tétanos-difteria.
Influenza estacional
La vacuna se debe aplicar a partir de los 60 años de edad. Previene la influenza, que es una enfermedad viral que se conoce también como gripa. Se diferencia del catarro común porque tiene síntomas más graves, como fiebre mayor de 38° C, tos, dolor de cabeza, secreción nasal, dolor muscular, dolor de articulaciones, cansancio extremo y puede complicarse cuando se presenta dificultad para respirar produciendo neumonía e, incluso, la muerte.
La influenza se presenta con mayor frecuencia durante la temporada invernal, por ello la vacuna se fabrica cada año y su aplicación es anual, preferentemente durante los meses de octubre a diciembre.
Principalmente se deben vacunar los adultos que egresan de un hospital, los que viven en una casa hogar y los enfermos de:
- Diabetes mellitus, asma, bronquitis y otras enfermedades pulmonares.
- Angina de pecho o insuficiencia cardiaca.
- Insuficiencia renal crónica.
- Padecimientos que disminuyen las defensas.
Neumococo
Esta vacuna evita la neumonía por una bacteria conocida como neumococo, que es una infección aguda y capaz de causar la muerte en el adulto mayor. Se debe aplicar a partir de los 65 años de edad en adultos sanos que no se han vacunado, con una revacunación a los 5 años por única vez. La vacuna también se puede aplicar desde los 60 años de edad, siempre y cuando sea indicada por el médico especialista en personas con factores de riesgo.
Tétanos y difteria
El tétanos es una infección causada por una bacteria que penetra a través de las heridas y la difteria es una enfermedad aguda que afecta al sistema respiratorio, provocando dificultad para respirar; ambas enfermedades pueden causar la muerte, gracias a la vacunación, cada vez es menos frecuente.
Debes acudir a aplicarte la vacuna si:
- Eres un adulto mayor sano y ya han pasado 10 años de que recibiste la última dosis.
- Tienes una herida.
- Trabajas en actividades relacionadas con la agricultura y la ganadería.
- Vives en zona de riesgo, que son los lugares en los que han ocurrido muertes por tétanos.
El esquema consta de tres dosis. La primera se aplica a partir de los 60 años; la segunda cuatro semanas después; y la tercera al año de la primera. La dosis de refuerzo cada diez años.
Fuente:
http://www.imss.gob.mx/sites/all/statics/salud/guias_salud/adultos_mayores/Guia_adultosmay_prevencion.pdf